Conoció el sabor de México en una tarde. La japonesa Eiko Osawa probó platillos exóticos de la comida mexicana, vio el proceso para preparar salsa en molcajete, disfrutó de la música con guitarras y maracas, y se contagió del ambiente alegre y relajado del restaurante La Bikina.
“Me sorprendió mucho este lugar. Aquí la gente es alegre y amable. Este es un México chiquito.
Probar los gusanos de maguey fue totalmente diferente. Me sentí un poco nerviosa, pero mi sorpresa fue grande al morder los gusanos crujientes envueltos en un taco de tortilla. Acabé con la porción.
Me cuentan que comer gusanos de maguey y huevos de hormiga no es común entre los mexicanos. Me siento afortunada de probarlos. ¡Son platillos muy deliciosos!
No pude evitar probar la salsa verde hecha en un molcajete. Es un instrumento de piedra que se usa para moler. En este restaurante preparan la salsa a la vista de todos. Una cocinera vestida con una blusa hermosa y colorida, muele los chiles en un molcajete. Me impresionó saber que hay muchos tipos de chiles y diferente maneras de prepararlos.
Ver la alegría en el ambiente, me hace sentir feliz. Esa misma alegría mexicana se percibe en el menú. Me trajeron un plato grande con los colores de la bandera mexicana: verde, blanco y rojo. Ahí estaba el afamado Chile en Nogada. Una combinación semi dulce con chile no picante. ¡Me gustó mucho!
El menú en este restaurante es totalmente mexicano. La gente es muy bonita. Ríe y canta mientras come. El ambiente es de fiesta. El servicio es amigable y cordial.
Conocí un área en este restaurante que puede ser útil para los hombres de negocios. Es privada y confortable.
En La Bikina encontré tradiciones muy mexicanas. Sombreros, nopales, guitarras y tequila. Viví una experiencia muy mexicana”.