Trabaja entre ingenieros y arquitectos haciendo una importante labor en la empresa Hazama Ando Corporation, una de las diez constructoras más importantes en Japón y con reconocimiento internacional
Por Eunice Mendoza
Su amplia experiencia laboral y su dominio del español y el japonés, la han llevado a ocupar cargos directivos en varias empresas japonesas. Actualmente es la responsable de mantener un buen clima laboral entre mexicanos y japoneses en Hazama Ando Corporation, empresa constructora ubicada en Irapuato.
Gran parte del éxito de esta importante empresa japonesa, recae en las decisiones de Sachi, una mujer nacida en Bolivia de padres japoneses. Ella todos los días se esfuerza para que se respete la cultural laboral de mexicanos y japoneses.
Sachi Nitabaru es un medio de entendimiento entre las dos culturas. Su labor es fundamental. Es gerente de Recursos Humanos y Asuntos Generales, y nos platica su trayectoria en las empresas japonesas.
“Yo soy boliviana de nacimiento. mis papás son japoneses. Mis abuelos después de la Segunda Guerra Mundial, emigraron cuando Japón estaba devastado., y Bolivia fue quien acogió a los japoneses.
Dieron oportunidad para que los japoneses cultivaran la tierra, eran terrenos deshabitados, era una jungla. Mis abuelos japoneses fueron de los primeros en llegar a Bolivia”.
Sachi ha trabajado en empresas japonesas en El Salvador, Bolivia, Guatemala, Guyana, Ghana, Paraguay y Tokio. Ahora vive en Irapuato (México) y trabaja siendo un vínculo entre mexicanos y japoneses para la constructora japonesa Hazama Ando Corporation, una de las 10 empresas constructoras más grandes de Japón.
“Como trabajo con japoneses y mexicanos y estoy en medio de los dos, entiendo lo que es la cultura japonesa y entiendo la parte latina. A veces es difícil actuar frente a la exigencia del jefe japonés porque quieren resultados con mucha rapidez y esa rapidez en México no se puede exigir, porque no es así la cultura mexicana”.
“Me costó tener ese equilibrio entre ambas culturas, no ser tan desesperada pero no ser tan paciente. El punto medio. He tenido choques en el aspecto laboral, pero mi función es siempre mantener el equilibrio. Nada fácil.
El staff mexicano me decía que era muy exigente, pero atrás estaba mi jefe japonés pidiendo más exigencia. He aprendido a entender a ambas culturas”.
“Los valores de los mexicanos son muy sinceros, son muy claros en decir las cosas que están mal y lo que no quieren. En la cultura japonesa no lo decimos”.
Sachi, experta en buscar el equilibrio en el ambiente laboral México-Japón, nos dice los puntos que ella considera más importantes para una provechosa cultura laboral.
Las 5 claves para convivir mejor en el trabajo entre mexicanos y japoneses:
- Los japoneses que llegan a México deben comprender y aceptar las costumbres y cultura mexicana.
- Es importante inculcar la cultura japonesa de trabajo, pero no se puede obligar a trabajar como en Japón porque no es la misma gente y no es la misma costumbre.
- Los mexicanos no pueden argumentar y decir: “así es en México”.
- La parte bonita de Japón es ser puntuales, y nos va a servir para todos. Tenemos que adaptar estas buenas costumbres y valorar la puntualidad y la responsabilidad
- No hay que ver las cosas negativas. Aprovecha a ver cosas positivas y sumar. Si llegas a un lugar aprovecha para sumar.